domingo, 11 de octubre de 2009

El punto justo

Hay días en los que te levantas y te das cuenta que ese va a ser un día de contrastes. Es imposible que le encuentres el punto justo a las cosas. Hoy es uno de esos días...
Y, al menos en mi caso, eso es malo, muy malo. Me explico: tengo tendencia a llevar las cosas a los extremos de natural. Pero los días de contrastes, esos extremos se antojan imposibles. Si me levanto y los niños tienen la habitación desordenada (vamos, como siempre hasta que llega el sargento Susana), entro en cólera y exigo solución inmediata. Si llamo a mis padres y el teléfono comunica, me indigno y asumo que SIEMPRE están hablando por teléfono cuándo yo llamo... si no lo cogen, entonces no entiendo para qué tienen teléfono si no lo oyen.
Y así, sin prisa pero sin pausa, el mundo se va posicionando contra mí. Indefectiblemente. Aunque parezca imposible, acabo agotada de luchar contra todo y contra todos.
Hoy he intentado hacer limpieza al mediodía. Me he retirado a mi habitación durante una hora para descansar. Tenía la intención de dormir y no pensar en nada, pero mi cerebro rebullía con todas las injusticias acaecidas durante la mañana, y todas las anteriores a lo largo de mi vida, que se enlazaban y correlaban con una pasión extraña.

Por una vez, insisto, he intentado hacer higiene mental. No estoy segura de haberlo conseguido. Al menos ha sido un cambio en la evolución habitual de estos días.

El problema lo tengo esta noche. Tengo canguro reservado desde hace varios días, pero no me apetece hacer nada con ese tiempo: no me motiva ir al cine, ni al teatro, ni salir a cenar o de copas. Y eso hace que mi día sea un poco más mierda, porque me va a costar dinero esta noche, y no va a ser para bien. Bueno, quizá se me ocurriría alguna cosa interesante que hacer. Pero no es viable.

Pero hoy no es un buen día para razonar. Si acaso para encerrarse en mi caja de Pandora particular y tirar bien lejos la llave. Para desear con todas mis fuerzas que mañana sea un día en el que le pueda encontrar el punto justo a las cosas.
.
.

No hay comentarios:

SUS...PIRO

Tanto aire exhalado sin sentido... intentaré hacer algo productivo con él y convertirlo en palabras.